Mi experiencia recorriendo Sudamérica haciendo voluntariados

Hace tres meses, por esas cuestiones que nos invitan a viajar salí de nuevo a la ruta. Salí a dedo desde mi ciudad, hacia Córdoba Capital, habiendo hecho algunos acuerdos con hosteles a través de Worldpackers. 

Anteriormente para viajar usé otra página, pero nunca me respondían y dejé de usarla. No la recomiendo. En este viaje decidí probar con Worldpackers. Pagué la cuota y empecé a investigar. Grata fue la sorpresa cuando las respuestas, por sí, o por no, llegaban a la bandeja de entrada. 

Mi experiencia recorriendo Sudamérica haciendo voluntariados

Usando Worldpackers por primera vez

Mi primera experiencia con Worldpackers fue en Salta Capital, a la semana y media de viaje. Yendo hacia Salta Capital haciendo dedo tuve mi primera boquiabierta paisajística. Yendo desde Cafayate a Salta Capital por la Ruta 68, me encontré con paisajes absurdamente hermosos, como este.

Esto es viajar.

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Llegué al Yunga Hostel después de haber visto, sin buscarla, una de las vistas más hermosas que me tocó presenciar en mi vida. 

Las tareas que me tocaron hacer eran recepción, atención del bar, y limpieza. Todas con total tranquilidad. Cinco días de trabajo, de cinco horas cada uno. Daba gusto trabajar. En los voluntariados la mayoría de la tareas son simples y sin esfuerzo. 

Estuve voluntariando dos semanas y media. La pasé muy bien. Conocí muchísimas personas, profundicé en la cultura de la ciudad y me llevé amistades para toda la vida. Además de las tareas normales a realizar en el hostel, hice un arreglo aparte, en el cual intercambié mis artes por dinero también. Pude trabajar gracias a la buena onda de los dueños. En mi caso yo hago publicidades y le filmé una publi al Yunga Hostel. Mejor no podía venir la situación. El viaje empezaba a tomar vuelo.

Hay muchas situaciones que pasan en los voluntariados que se repiten todo el tiempo. Y uno es romper el límite de tiempo del voluntariado. En tan poco tiempo generas una empatía tan fuerte con la gente de cada lugar que nunca queres irte. Y si te lo permiten, unos días mas son bienvenidos. 

Pedí unos días de más, porque se había formado un grupo muy ameno, ya saben, cuando se viaja en poco tiempo se forjan lindas conexiones. Y gracias a los dueños, los conseguí.

Haciendo un voluntario en Humahuaca

Apenas salí del Yungas Hostel, en la ciudad de Salta, ya tenía organizado de antemano otro voluntariado en la ciudad de Humahuaca, en Jujuy, Argentina. Un alojamiento con aire muy hogareño que te hace sentir como si fueses familia. 

En la Humahuacasa hostel normalmente me tocaba la recepción o la limpieza. Un turno de 6 horas en la tranquilidad de Humahuaca. Un pueblo en el Norte de Argentina en el que encuentras la paz en sus calles.

¿Cómo es hacer un voluntariado en Humahuaca?

El trabajo era muy tranquilo, puesto que la ciudad es muy tranquila, y las tareas se realizaban en acuerdo con los demás. Un mes voluntarié en La Humahuacasa. No puedo describir lo bien que me sentí también en ese lugar. Pude también trabajar de mis artes en el lugar, haciendo otra publicidad, esta vez, a cambio de la comida diaria:

Pude abaratar mis costos de manera significativa, y en esas tres semanas solo gasté 1800 Pesos Argentinos (40U$S). Es que me di mis gustos también y aproveché para gastar un poco en cosas que me gustan. 

Después de Humahuaca subí hacia el país vecino: Bolivia. Tenía arreglado un voluntariado en la ciudad de Tarija.

Haciendo un voluntariado en Tarija, Bolivia

Llegué a La Cúpula Hostel, un hostel familiar con camping y un espacio muy grande para poder disfrutar del clima de la ciudad.  Mi tarea consistía en mantener las redes sociales y recibir a los viajeros. Aproveché para conocer la ciudad, e hice amistades que no se borrarán. El trabajo era tranquilo y organizado. Y como ya vengo con un poco de mañas aprendidas de estos meses, lo pude hacer óptimamente.

Pasé un mes espectacular trabajando allí. En La Cúpula también pude trabajar con mis artes, y por fuera del voluntariado, arreglamos para hacer una publicidad del lugar. Mi viaje iba sobre ruedas, conocía gente de todos lados del mundo, lugares, trabajaba de lo que me gusta trabajar; ¿Qué más puede uno pedir?

Hace cerca de 4 meses ya que estoy viajando y no puedo decir que esto no funciona. Es la joya de viajar barato. Un diamante en bruto al que solo le han descubierto la punta. 

Gracias a esta página pude trabajar en distintas ciudades en mi viaje por Sudamérica, tuve oficinas en casas hechas de adobe, en party hosteles que parecen hoteles cinco estrellas, con ventanales que daban a paisajes que te hacen temblar, viví culturas que nunca creí que existían, conocí personas de los países mas recónditos del planeta. 

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Viajar es la escuela de la vida. Y esta página es la llave para poder aprender que es el mundo de otra manera, una forma más profunda y más barata de lo que uno se imagina. 

En este momento estoy en la cocina del Rooftop Party Hostel. En el que estoy voluntariando, trabajando en la recepción. Estoy escribiendo esta nota en el 6to piso de un edificio enorme, en el medio de La Paz, Bolivia. Y no puedo estar más contento del lugar que estoy ocupando. Esta es la vista de mi oficina hoy. Con el cerro Illimani que me dice de frente: ¿Has visto donde estás tu que que antes no te animabas?

Espero que mi experiencia recorriendo Sudamérica haciendo voluntariados te sirva de motivación para aventurarte, salir a la ruta y descubrir este hermoso continente.