Mi experiencia haciendo un voluntariado en Portugal

La primera vez que realicé un voluntariado fue en Lagos, Portugal, con la ayuda de la plataforma de Worldpackers. En realidad, comenzó bastante antes cuando todavía estaba en Argentina y tenía mis pasajes a Medio Oriente. Estaba en otro país, incluso en otro continente, y aún faltaban ocho semanas para comenzar los tres meses de viajes que estaba planificando. Así fue que encontré Worldpackers. Sabía que en muchos lugares, principalmente turísticos, se daba el intercambio de trabajo por estadía, pero encontrar esta aplicación fue la forma de facilitar esas posibilidades.

¿Cómo funciona Worldpackers?

Si aún no la conoces o tienes dudas, este video te brindará la información más completa:

Poco tiempo después, aunque todavía no me imaginaba cómo iba a llegar ni desde dónde, ya lo sabía: en agosto me estarían esperando en Lagos, sur de Portugal, para colaborar con los check in y check out durante 4 o 5 horas por día. Y así fue. El 10 de agosto llegué a una ciudad hermosa, Lagos, para colaborar con un hostel tranquilo y no demasiado grande. Justo lo que quería.

¿Qué tareas realizaba como voluntario?

Mis tareas fueron recibir a los huéspedes y viajeros, mostrarles el hostel, las habitaciones, los servicios disponibles, etc. Ese era mi trabajo desde las cinco de la tarde hasta las nueve de la noche. Por la mañana y las tardes, todo se trataba de conocer playas, andar en bicicleta y, en algunas ocasiones, también en ayudar a los otros voluntarios con las tareas que les tocaban. En general, ellos y ellas se vuelven tus amigos, las personas con las que compartís muchas de las anécdotas que te tocan vivir en el lugar que elijas para hacer tu voluntariado.

¿Vale la pena hacer un voluntariado en Lagos, Portugal?

El equipo del hostel se completaba con los dueños del hostel. Bianca y Thiago eran los anfitriones y con quienes Worldpackers me puso en contacto a través de la aplicación. El hostel era una remodelación de la casa de los abuelos de Thiago y por eso tanto él como Bianca conocen muy bien la ciudad y sus alrededores. Ellos me recomendaron actividades para hacer y las mejores playas para conocer. En cuanto a mi trabajo, fueron muy claros en cuanto a las tareas que esperaban que realizara y se ocuparon de explicarme todo. A medida que iban llegando los huéspedes, tenía que avisarles que ya estaban instalados o si había algún problema que no pudiera resolver. Al mantener una buena comunicación, el día a día fue muy ameno y relajado.

Estoy muy contento de haber tenido esta experiencia que me sirvió para crecer en muchos sentidos. Conocí una nueva forma de viajar ahorrando (durante los 25 días, gasté menos de 150 euros y ¡nada en hospedaje!), de practicar idiomas, de conocer gente y lugares maravillosos. 

Sin dudas, haber utilizado la aplicación fue una muy buena decisión. Por supuesto que una vez que me despedí de todas las personas con las que compartí los veinticinco días en el hostel, volví a abrir la aplicación para pensar cuál sería mi próximo destino. 

Si estás pensando en hacer un viaje haciendo un voluntariado, no dudes en echarle un ojo a las cientos de ofertas que ofrece la plataforma alrededor del mundo.