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Conociendo 20 de los mejores lugares tranquilos donde desconectar de todo

Prepara tu equipaje y respira profundo para embarcarte en un viaje de relajación hacia 20 lugares tranquilos donde tomarte tiempo de calidad contigo mismo/a.

12min

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En un mundo cada vez más vertiginoso y lleno de ruido, la búsqueda de lugares tranquilos se convierte en un anhelo compartido por muchos.

En este artículo, exploraremos 20 destinos serenos alrededor del globo, donde la paz y la tranquilidad reinan supremas. Desde remotos santuarios naturales hasta lugares sagrados para sus comunidades, cada lugar ofrece un refugio para el alma cansada y la mente inquieta.

Nos aventuraremos por valles silenciosos donde el murmullo del viento es la única banda sonora, descubriremos playas desiertas donde el susurro del mar arrulla los pensamientos, y nos perderemos entre los pasillos de antiguos templos donde el tiempo parece detenerse.

A través de estas experiencias únicas, exploraremos la calma en su estado más puro, recordándonos la importancia de desconectar del ajetreo cotidiano y conectar con nosotros mismos.

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20 lugares tranquilos para visitar


Chica sentada en una playa tranquila viendo el atardecer

1. Parque Nacional de Banff, Canadá

El Parque Nacional de Banff es un refugio sereno en el corazón de las Montañas Rocosas, sin dudas uno de los lugares con los mejores paisajes de Canadá

Sus vastos paisajes de montañas escarpadas, densos bosques y lagos de aguas cristalinas inspiran calma y contemplación. Aquí, el sonido del viento entre los pinos y el susurro de los arroyos son la banda sonora perfecta para la paz interior en contacto con la naturaleza

Ya sea observando el reflejo del cielo en el agua del lago Moraine o simplemente respirando el aire fresco de la montaña, el Parque Nacional de Banff ofrece una escapada tranquila y rejuvenecedora.

2. Gran Cañón del Norte, Estados Unidos

A diferencia de las concurridas zonas turísticas en la parte sur, la sección norte del Gran Cañón, en Arizona, ofrece una experiencia más tranquila y menos concurrida, ideal para aquellos que buscan paz y serenidad.

Sus imponentes acantilados de roca rojiza se elevan majestuosamente sobre el río Colorado, creando un espectáculo visual que deja sin aliento. Puedes explorar sus senderos escarpados y contemplar los vastos paisajes desde miradores panorámicos, sumergiéndote en la grandiosidad de este fenómeno geológico.

3. Valle de Bravo, México

El Valle de Bravo, anidado en las montañas del Estado de México, es un remanso de paz y tranquilidad. Su atmósfera relajada se combina con la belleza natural del lago Avándaro, creando un entorno perfecto para la serenidad.

Este encantador pueblo colonial, elegido como uno de los pueblos mágicos de México, con sus calles adoquinadas y casas de arquitectura tradicional, invita a pasear sin prisas, mientras que las colinas circundantes ofrecen senderos para explorar la exuberante vegetación y disfrutar de vistas panorámicas. En el Valle de Bravo, el tiempo parece desacelerar, permitiendo a los visitantes encontrar la tranquilidad que anhelan.

4. Parque Nacional de Torres del Paine, Chile

Ubicado en la remota región de la Patagonia chilena, el Parque Nacional Torres del Paine es uno de esos lugares que nos hacen sentir pequeños ante la inmensidad de la naturaleza.

Sus imponentes montañas, glaciares centelleantes y lagos de color turquesa crean un escenario de serenidad incomparable. Puedes explorar este paraíso natural a través de caminatas en senderos bien marcados, donde por momentos el único sonido que rompe el silencio es el crujir de la nieve bajo los pies o el eco distante de un río caudaloso.

Ya sea contemplando sus famosos picos de granito que le dan nombre al parque, o navegando por el tranquilo lago Pehoé, cada rincón de este parque nacional invita a la introspección y al descanso en la naturaleza.


Joven haciendo un trekking en Torres del Paine, uno de los mejores lugares tranquilos

5. Quebrada de Humahuaca, Argentina

La Quebrada de Humahuaca, ubicada en el norte argentino, es un tesoro natural y cultural reconocido como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

Este impresionante cañón se extiende a lo largo de 155 kilómetros en la Provincia de Jujuy, atravesando paisajes únicos y pueblos llenos de historia. Entre los pueblos más conocidos se encuentran Purmamarca, famoso por el Cerro de los Siete Colores; Tilcara, con su fortaleza precolombina; y Humahuaca, con su icónico reloj solar y su vibrante mercado.

Durante la temporada alta de enero y febrero, la Quebrada de Humahuaca se llena de turistas que buscan explorar sus maravillas naturales y culturales. Sin embargo, el resto del año suele estar notablemente tranquila, ofreciendo la oportunidad de disfrutar de la serenidad del paisaje y descubrir pueblos menos conocidos como Maimará, Uquía o Huacalera. Estos rincones menos transitados brindan la posibilidad de sumergirse en la calma absoluta y conectar con la autenticidad de uno de los mejores lugares para visitar en Argentina.

6. Lago Bled, Eslovenia

Enclavado en un paisaje de cuento de hadas en los Alpes Julianos de Eslovenia, el Lago Bled es un paraíso de tranquilidad y belleza natural en el centro de Europa.

Su característica isla con una iglesia encantadora añade un toque de misticismo a la serenidad del lugar. Puedes navegar por las aguas cristalinas del lago en tradicionales pletnas o simplemente disfrutar de la vista desde la orilla, donde el castillo de Bled se alza majestuoso sobre acantilados verdes. Los senderos que rodean el lago ofrecen la oportunidad de sumergirte en la tranquilidad del entorno natural, con vistas impresionantes de las montañas circundantes. 

7. Hallstatt, Austria

Hallstatt, un pueblo encantador situado a orillas del pintoresco lago Hallstätter See, es un verdadero tesoro austriaco.

Con sus casas de colores pastel que se reflejan en las tranquilas aguas del lago y sus montañas cubiertas de bosques que lo rodean, Hallstatt parece sacado de un cuento de hadas. Sus estrechas calles empedradas invitan a pasear sin prisas, descubriendo encantadoras tiendas de artesanía local y acogedores cafés donde se puede disfrutar de un delicioso strudel de manzana.

El pueblo también es famoso por su historia, albergando antiguas minas de sal y un museo que cuenta la fascinante historia de la región. Además, desde Hallstatt se pueden realizar paseos en barco por el lago o ascender en teleférico para disfrutar de vistas panorámicas de ensueño.


Casas alpinas a orillas del lago en Hallstatt, Austria

8. Isla de Skye, Escocia

La Isla de Skye, envuelta en la bruma del Atlántico Norte, es un destino mágico que cautiva con su belleza salvaje y sus paisajes impresionantes.

Conocida por sus dramáticos acantilados, montañas escarpadas y lagos serenos, Skye ofrece un espectáculo natural inigualable en cada rincón. Los viajeros quedan maravillados por los Cuillin, una cadena montañosa que domina el horizonte con sus picos afilados y sus desafiantes rutas de senderismo. Los castillos en ruinas, como el imponente Dunvegan, añaden un toque de misterio y romance a la isla. Los paisajes cambiantes, desde praderas verdes hasta páramos salvajes, crean un telón de fondo perfecto para el descanso y la exploración.

Además, Skye es hogar de una rica herencia cultural, con tradiciones gaélicas que perduran en sus pintorescos pueblos y en la calidez de su gente.

9. Fiordos noruegos

Los fiordos noruegos son una maravilla natural que invita a sumergirse en la serenidad de su entorno. Estas impresionantes formaciones geográficas, esculpidas por glaciares durante milenios, ofrecen una experiencia única en lugares tranquilos donde la naturaleza reina en su estado más puro.

Con sus imponentes acantilados que se sumergen en aguas tranquilas y profundas, los fiordos crean un paisaje de una belleza sobrecogedora. Podrás explorar esta maravilla navegando en barco entre las aguas serenas, contemplando cascadas que se deslizan desde alturas vertiginosas y disfrutando de la paz que emana de los bosques que cubren las montañas circundantes.

Además, los pequeños pueblos pesqueros que salpican la costa añaden un encanto pintoresco a la experiencia, ofreciendo la oportunidad de descubrir su autenticidad en un entorno de pura tranquilidad. Los fiordos noruegos son verdaderos refugios de calma y belleza que no dejan de sorprender y cautivar a quienes los visitan.

10. Valle de Mello, Italia

Conocido por sus imponentes paredes de granito y sus pintorescas aldeas alpinas, el Valle de Mello es un hermoso lugar tranquilo de la región de Lombardía, en el norte de Italia.

Sus senderos serpentean entre bosques frondosos y prados alpinos, ofreciendo vistas espectaculares de los picos circundantes y las cascadas que salpican el paisaje. Entre los lugares más destacados se encuentra el Cañón de Mello, un impresionante desfiladero tallado por el río homónimo, y el Lago di Mezzola, un tranquilo lago de montaña rodeado de bosques.

Además, las pintorescas aldeas de San Martino y Bagni di Masino te invitan a explorar su encanto histórico y disfrutar de la gastronomía local. En el Valle de Mello, la tranquilidad y la naturaleza se entrelazan para crear una experiencia verdaderamente mágica.

11. Parque Nacional de Peneda-Gerês, Portugal

Situado en el norte de Portugal, Peneda-Gerês es un santuario de naturaleza virgen que cautiva con una belleza indómita y una tranquilidad incomparable.

Sus extensas áreas protegidas albergan una variedad de ecosistemas, desde bosques frondosos y ríos cristalinos hasta imponentes montañas y cascadas majestuosas. Además, el parque es hogar de una rica biodiversidad, incluyendo especies en peligro de extinción como el lobo ibérico y el águila real.

Con su atmósfera serena y sus paisajes intocados, el Parque Nacional de Peneda-Gerês es uno de esos lugares tranquilos para aquellos que buscan conectarse con la naturaleza en su estado más puro.


 lugares tranquilos: chica apreciando el paisaje del Parque Nacional Peneda-Geres

12. Valle de Katmandú, Nepal

Desde la vibrante energía de Thamel hasta la serenidad ancestral de Bhaktapur, cada rincón del Valle de Katmandú es un tesoro de la cultura y espiritualidad característica de Nepal.

En Patan, los intrincados templos de estilo newari y las plazas animadas invitan a sumergirse en la rica historia y la artesanía local. Mientras tanto, en Boudhanath, la majestuosa estupa budista domina el horizonte, ofreciendo un lugar de paz y contemplación para aquellos en busca de experiencias espirituales. Además, los callejones empedrados de Bhaktapur revelan antiguas tradiciones y una arquitectura impresionante, transportándote a tiempos pasados.

En el Valle de Katmandú se vive una conexión profunda con lo espiritual y una experiencia cultural enriquecedora que perdura en la memoria de quienes lo viven.

13. Islas Andamán y Nicobar, India

Es probable que no asocies a la India con sus playas, pero estas joyas ocultas en el Océano Índico son un paraíso de serenidad y belleza natural. Con playas de arena blanca, aguas cristalinas y una biodiversidad marina espectacular, estas islas son un destino de ensueño si lo que estás buscando es tranquilidad y la naturaleza.

Explorar los arrecifes de coral en snorkel o buceo revela un mundo submarino vibrante y colorido, mientras que las selvas tropicales ofrecen oportunidades para caminatas tranquilas entre una flora y fauna únicas.

En la isla de Havelock, la playa Radhanagar cautiva con su belleza prístina y sus atardeceres impresionantes. Además, las culturas indígenas de las tribus locales añaden una profundidad cultural fascinante a la experiencia. En las Islas Andamán y Nicobar, cada rincón te invita a desconectar del ruido exterior y sumergirte en la paz y la serenidad de estos lugares tranquilos.

14. Dharamsala y McLeodganj, India

Estos dos pueblos ubicados en las estribaciones del Himalaya ofrecen vistas impresionantes de las montañas y una atmósfera tranquila que invita a la contemplación y la introspección.

Dharamsala es conocida como el hogar del gobierno tibetano en el exilio y alberga el Templo Tsuglagkhang, un importante lugar de peregrinación budista.

Por otro lado, McLeodganj es famosa por su vibrante comunidad tibetana, sus monasterios antiguos y su bullicioso mercado de artesanías. Puedes disfrutar de caminatas escénicas en las colinas circundantes, explorar la cultura tibetana en el Museo del Tíbet y degustar la deliciosa comida tibetana en los numerosos restaurantes locales.

En conjunto, Dharamsala y McLeodganj ofrecen una experiencia única que combina espiritualidad, aventura y tranquilidad en un entorno pintoresco del norte de la India.

15. Provincia de Yunnan, China

Yunnan es un tesoro de belleza natural y cultural ideal para desconectarse y vivir días de paz. Desde los picos nevados del Himalaya hasta las exuberantes selvas tropicales de Xishuangbanna, este rincón del suroeste chino ofrece una variedad de paisajes impresionantes.

Los antiguos pueblos de Lijiang y Dali te transportan a la China tradicional con sus calles empedradas y arquitectura histórica. Los campos de arroz en terrazas de Yuanyang son una maravilla agrícola y visual que refleja siglos de ingenio humano. Por otro lado, la mística ciudad de Shangri-La, rodeada de majestuosos picos y monasterios tibetanos, invita a la contemplación y la espiritualidad. Además, la rica biodiversidad de Yunnan se manifiesta en parques naturales como el Parque Nacional de Pudacuo, hogar de lagos cristalinos y bosques encantadores.

En Yunnan, cada rincón ofrece una experiencia única que te sumerge en la fascinante cultura y naturaleza de China.


Construcciones budistas junto a un arroyo y montañas nevadas de fondo en Dali, uno de los lugares tranquilos de China

16. Delta del Okavango, Botsuana

En el corazón de África, un oasis de vida salvaje se despliega majestuosamente entre las planicies y los pantanos. Aquí, las aguas tranquilas del delta se deslizan suavemente entre juncos y papiros, creando un laberinto acuático que alberga una asombrosa variedad de vida silvestre.

Elefantes, búfalos, leones y leopardos; este paraíso natural ofrece innumerables encuentros con algunas de las especies más icónicas del continente africano. Los safaris en canoa o en mokoro brindan una oportunidad única para explorar este ecosistema único a través de actividades ecoturísticas, mientras que los paseos en vehículos todo terreno permiten descubrir la diversidad de la fauna terrestre.

Además, la belleza serena del paisaje, con sus puestas de sol doradas y sus cielos estrellados, ofrece un telón de fondo perfecto para una experiencia inolvidable en la naturaleza africana.

17. Parque Nacional de los Volcanes, Ruanda

Entre las verdes colinas y los densos bosques de este país africano se encuentra un santuario natural de una belleza impresionante. Aquí, la vida silvestre florece en un entorno montañoso que alberga a los majestuosos gorilas de montaña.

Las montañas cubiertas de neblina y los valles exuberantes crean un paisaje que invita a la aventura y la exploración. Con sus imponentes volcanes y sus misteriosas selvas, este lugar tranquilo es el hogar de algunas de las criaturas más fascinantes del planeta.

En este pequeño país del centro del continente tienes la oportunidad única de realizar emocionantes trekkings en busca de estos primates, viviendo encuentros cercanos que dejarán una huella indeleble en tu corazón. 

18. Zanzíbar, Tanzania

Con playas de arena blanca y aguas turquesas que acarician la costa, Zanzíbar es un paraíso terrenal de Tanzania donde el tiempo parece detenerse. Los aromas de especias y la brisa marina se entrelazan en el aire, creando una atmósfera embriagadora y exótica.

En cada rincón de esta isla, la cultura swahili se manifiesta en la arquitectura de sus edificios históricos y en la hospitalidad de su gente. Los mercados llenos de vida ofrecen una variedad de colores y sabores que estimulan los sentidos. Además, la biodiversidad marina invita a explorar los arrecifes de coral en busca de peces tropicales y otras criaturas marinas fascinantes.


Playa con agua turquesa y botes de pescadores en Zanzíbar

19. Isla de Tasmania, Australia

En el extremo sur de Australia, se encuentra la encantadora isla de Tasmania, un paraíso natural que te envuelve con su tranquilidad.

La Cordillera de los Montes Wellington y Cradle se alzan majestuosamente, ofreciendo vistas panorámicas impresionantes. La ciudad de Hobart, con su vibrante escena cultural y el icónico Salamanca Market, es un punto de partida ideal para explorar la isla. La Península de Freycinet, con sus playas de arena blanca y la famosa Wineglass Bay, es otro de los muchos lugares tranquilos que encontrarás en Tasmania.

Además, la isla alberga una rica vida salvaje, incluyendo el famoso Diablo de Tasmania, que se puede observar en el Santuario de Vida Silvestre de Bonorong

20. Parque Nacional Tongariro, Nueva Zelanda

Cerramos nuestro viaje por lugares tranquilos del mundo, en el fascinante Parque Nacional Tongariro, ubicado en el centro de la Isla Norte de Nueva Zelanda.

En este sitio declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, explorarás una variedad de paisajes, desde cráteres de volcanes activos hasta lagos de aguas cristalinas y bosques prístinos.

Destacan los tres icónicos volcanes, Tongariro, Ngauruhoe y Ruapehu, que ofrecen impresionantes vistas panorámicas al recorrerlos como parte de senderos como el Tongariro Alpine Crossing, mundialmente famoso por sus paisajes surrealistas.


 lugares tranquilos: chica observando lagos volcánicos en Tongariro

Viaja por lugares tranquilos con alojamiento gratuito

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Además de permitirte viajar sin pagar alojamiento, estos voluntariados son una manera de tener una inmersión cultural profunda al convivir con locales, desarrollar nuevas habilidades, y conocer gente con intereses similares a los tuyos.

Para participar, solo tienes que crear un perfil gratuito en la comunidad de Worldpackers y empezar a guardar tus vacantes favoritas. Una vez que tengas varias que te interesen vistas, puedes verificar tu perfil para así ponerte en contacto en el anfitrión del voluntariado.

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